
El exministro de Gobierno durante la gestión transitoria, Arturo Murillo, arribó al país la madrugada de este jueves procedente de Estados Unidos, donde cumplió una condena por lavado de dinero y soborno. A su llegada al aeropuerto Viru Viru de Santa Cruz, fue aprehendido por la Policía y trasladado hacia La Paz para quedar a disposición de la justicia.
Sentencias en Bolivia y Estados Unidos
Murillo acumula ya tres condenas:
- EEUU (2023): 70 meses de prisión por conspiración para lavar dinero proveniente de sobornos vinculados con la compra de gases lacrimógenos en 2019.
- Bolivia – Caso Gases Lacrimógenos: ocho años de cárcel por la adquisición con sobreprecio de material antidisturbios durante la crisis política de 2019.
- Bolivia – Caso Gases Ecuador: cinco años y cuatro meses por el ingreso irregular de armamento no letal desde ese país.
En total, el exministro estuvo involucrado en operaciones que, según documentos judiciales, le reportaron al menos 532.000 dólares en sobornos, lavados a través del sistema financiero estadounidense.
Más de 20 procesos en su contra
El fiscal departamental de La Paz, Luis Carlos Torrez, informó que Murillo enfrenta 22 procesos penales en la sede de gobierno. De esos, ocho siguen activos y dos ya concluyeron con sentencia. Entre los casos pendientes figuran las investigaciones por las muertes en Senkata (El Alto) y Huayllani (Cochabamba) en 2019, además de causas relacionadas con los denominados “gases Argentina”, “Segip”, “Libreta militar”, “catering”, “legitimación de ganancias ilícitas” y la extradición de Lima Lobo, entre otros.
Murillo también enfrenta un juicio civil interpuesto por Lourdes Pacheco, a quien en 2020 acusó de rapto. La demandante exige una indemnización de un millón de dólares por daños y perjuicios.
Próximos pasos
El exministro deberá comparecer en una audiencia cautelar en La Paz. Si bien una resolución judicial previa indica que debería ser recluido en la cárcel de San Pedro, la Procuraduría pedirá que sea enviado al penal de máxima seguridad de Chonchocoro.
Murillo dejó Bolivia en 2020, tras el triunfo de Luis Arce en las elecciones generales. Su retorno se concreta después de cumplir condena en Estados Unidos y tras el rechazo a sus pedidos de asilo en ese país y en terceros destinos.