
Tony Janzen Valverde Victoriano, conocido como “Pequeño J”, fue detenido en Perú y será extraditado a la Argentina, acusado de ser el autor intelectual del brutal asesinato de Brenda del Castillo (20), Morena Verdi (20) y Lara Gutiérrez (15) en Florencio Varela.
El joven de 20 años era buscado desde el viernes, cuando la Justicia emitió un pedido de captura nacional e internacional ante la sospecha de que pudiera escapar del país. Finalmente, fue localizado y arrestado por las autoridades peruanas.
Un crimen que conmocionó al país
Según la investigación, “Pequeño J” habría planeado y ordenado el secuestro, tortura y asesinato de las tres jóvenes, a quienes atrajo con engaños hasta una vivienda donde fueron asesinadas con extrema violencia.
Los investigadores creen que el crimen fue un mensaje mafioso dentro de una disputa narco: las víctimas fueron descuartizadas y la tortura fue transmitida en vivo por un grupo cerrado de Instagram.
Definido por la Justicia como un delincuente “joven, sanguinario y sin límites”, Valverde Victoriano se ganó un lugar de poder dentro del narcotráfico a pesar de su corta edad.
El origen de “Pequeño J”
Tony nació en La Libertad, Perú, y creció rodeado de violencia. Es hijo de Janhzen Valverde, integrante de la banda criminal “Los Injertos de Nuevo Jerusalén”, asesinado en 2018 en un ajuste de cuentas.
La muerte de su padre estuvo vinculada a una sangrienta disputa entre bandas: Wilder Lara Chávez, miembro de “La Jauría”, lo ejecutó en represalia por el asesinato de su cuñado Santos López Guevara, integrante de “El Gran Marqués”.
Cinco meses después de ese crimen, el hijo de Janhzen adoptó el alias de “Pequeño J” y se convirtió en un actor clave del narcotráfico en la región. Hoy, acusado de ser el “cerebro” del triple femicidio que conmocionó a la Argentina, espera su extradición para enfrentar a la Justicia.